La comprobación urbanística es la revisión previa de la situación urbanística de un inmueble o terreno para conocer su clasificación y calificación del suelo, edificabilidad, usos permitidos, licencias existentes, posibles expedientes sancionadores y afecciones o cargas urbanísticas.
Esta comprobación se realiza normalmente mediante consultas al ayuntamiento, al planeamiento vigente, al Registro de la Propiedad y al Catastro, y es un paso clave antes de comprar, reformar, construir o tasar una propiedad, ya que permite detectar limitaciones legales, obras ilegales o riesgos que afecten a su valor y viabilidad.
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